Ryan Reynolds: "Hace falta un superhéroe real, porque estamos bien jodidos"

Linterna verde

Parece difícil que alguien que haya estado casado con Scarlett Johansson caiga bien, pero Reynolds es un tipo sencillo, tranquilo y encantador. También es el protagonista de Linterna Verde, donde encarna a un peculiar superhéroe que trata de salvar el mundo.

Otra vez en España...
Sí, creo que he estado unas doce veces. Conocí vuestro país de joven, viajando de mochilero por Europa, y luego he vuelto para promocionar películas, rodar Enterrado y hasta de vacaciones.

¿Qué hace aquí de vacaciones?
No parar de andar, e intentar evitar lo que hacen todos los turistas. Por suerte, tengo amigos en Madrid y en Barcelona, y puedo probar otras cosas.

Ahora promociona Linterna Verde: ¿qué hace especial a esta película?
Primero, que es una historia muy antigua: el cómic nació en 1940. Además, mi personaje vive una evolución muy interesante: empieza siendo temerario, irresponsable y engreído, pero recibe un extraordinario regalo que lo obliga a cambiar. De pronto, encuentra sentido a su vida a base de mucha humildad.

Es un superhéroe, pero no tan popular como Superman...
Obvio, pero eso lo hacía aun más atractivo: nuestra misión es, precisamente, inventarlo. No decepcionaremos a millones de fans porque no los tiene, y hemos podido hacerlo más nuestro.

¿Se parece usted al personaje?
Como él, como cualquiera de nosotros, he tenido que enfrentarme a muchos miedos y superarlos con valor. Por ejemplo, me fui a vivir a Los Ángeles siendo un desconocido, pero quería buscar allí mi futuro... No fue nada fácil, pero lo logré.

¿Por qué?
En primer lugar porque trabajé duro para estar bien preparado cuando llegara mi oportunidad. Además, he tenido mucha suerte: nunca imaginé que conseguiría esto. También me siento afortunado porque he podido ascender paso a paso, crecer poco a poco: de haber llegado al estrellato con 20 años no habría estado preparado para tanta presión. Necesitaba madurar, ser más responsable... Cosas que solo te da la edad. Hollywood puede ser un lugar muy peligroso si eres una joven estrella.

¿Ya no lo ve tan peligroso?
Bueno... Vivimos en un mundo distinto. Por suerte, cuando empecé a trabajar en el cine no había teléfonos móviles, con cámara e Internet, que pueden hundir tu carrera en un minuto. Ahora, que sí los hay, me he quitado muchas tonterías de juventud, e intento evitar esos riesgos.

¿Lo hizo más prudente ser pareja de mujeres muy famosas?
Me ha enseñado, entre otras muchas cosas, a temer al periodismo amarillo. La gente disfruta contemplando la miseria ajena, sobre todo si eres famoso. Es algo que crece en los medios: está bien humillar al personaje público, que te vaya bien es motivo suficiente para que todo el mundo te desee lo peor. Si eres arrogante y maleducado, puedo llegar a entenderlo, pero en el caso opuesto...

A usted lo enterraron, literalmente, en Enterrado.
¡Fue agotador! La verdad, creí que pasarme un rodaje tumbado en una caja sería relajado, ¡pero Rodrigo Cortés [el director] me engañó! Cuando volví en el avión de Barcelona me di cuenta de que estaba verdaderamente hecho polvo, lleno de heridas y con un hombro lesionado. Pero valió la pena:_era una buena película.

Aquí fue un éxito, ¿y en EE UU?
No funcionó. ¿Sabes por qué? Allí el público es adicto a los finales felices. Si mi personaje hubiera salido a la superficie con una metralleta y hubiese matado a todos los terroristas la gente se habría entusiasmado, ¡pero habría sido ridículo y yo no habría hecho la película! En Europa es normal que una película acabe mal, pero en EE UU eso mismo se considera cine experimental. En fin...

Imagine que Linterna Verde es un éxito: ¿repetiría en el papel o temería encasillarse?
¡Me encantaría repetir si me llaman! Además, no creo que este papel me encasille. Como te decía, mi carrera ha crecido lentamente, he hecho muchas películas y probado varios géneros, así que este no sería mi único papel recordable. Si fuese mi primera película, quizá. Pero con todas las que he hecho, no lo creo.

Siempre harán falta superhéroes, además...
En estos tiempos, seguro. No es nada nuevo, en la II Guerra Mundial crearon a Superman porque aportaba fantasía e ilusión al día a día: eso de que alguien pudiera venir de otro planeta a salvarnos era delicioso. Ahora pasa algo parecido. Las películas de superhéroes aportan escapismo, no hablan de la vida real, sino que proponen una forma de huir de esa realidad. Así que es cierto, puede ser un buen momento.

¿Necesitamos, otra vez, que un superhéroe nos salve?
Desde luego, porque estamos bien jodidos.

¿Algún candidato? El último fue Obama, y dos años después no parece haber cambiado nada...
¿Sabes qué? Según me hago mayor también me vuelvo más cínico. No sé como serán los políticos españoles, pero en EE_UU el poder está en mano de poderosos grupos corruptos, así que no hay mucho que hacer. Es lo que tiene esta sociedad capitalista: todos nos hemos vuelto esclavos del dinero. Espero que las cosas cambien, porque hace mucha falta... Solo me consuela pensar que la gente siempre ha dicho lo mismo: todo está hecho una mierda. Y así seguiremos dentro de 60 años: quejándonos, pero, como cucarachas, sobreviviendo.

Un hombre envidiado

Nació en Vancouver, Canadá, en 1976. Es el pequeño de cuatro hermanos. Tras trabajar de adolescente en varias series televisivas, sobrevivió durante meses en Los Ángeles con trabajos sin pena ni gloria. Películas como Dos colgados muy fumados, Blade: Trinity o La morada del miedo lo hicieron famoso. Fue novio durante dos años de Alanis Morrisette y estuvo casado entre 2008 y 2011 con Scarlett Johansson. En 2010 fue elegido el hombre más sexy del mundo por la revista People. Ha sido candidato al Goya al mejor actor por Enterrado.// 20minutos.es

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